Persiste el Agua Contaminada con Arsénico Para Habitantes de Zimapán: Lozano Moreno
* Investigaciones del IGEF alertan a la población sobre la ingesta de agua contaminada, que provoca intoxicación aguda y crónica
Por Francisco Rodríguez
Zimapán, Hidalgo.- En las oficinas de la presidencia municipal de Zimapán en el estado de Hidalgo, su munícipe José María Lozano Moreno en entrevista con algunos medios de comunicación invitados dijo, la contaminación de agua con arsénico es una realidad en nuestra localidad y a pesar de los esfuerzos del gobierno federal y local, esta persiste.
Lozano Moreno detalló que según los estudios de la investigadora del Instituto de Geofísica (IGEF) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Doctora Ma. Aurora Armienta Hernández, y quien durante 20 años ha realizado investigaciones sobre el tema, demuestran que el 50 por ciento de mujeres que consumen agua contaminada con arsénico padecen problemas de arsenicismo o cáncer.
Cabe recordar que la toxicidad del arsénico es mortal en el ser humano, es de dos tipos: aguda y crónica. La primera es resultado de la ingesta de aguas contaminadas con un alto contenido de arsénico en un tiempo corto y la crónica es consecuencia de ingerir aguas contaminadas con cantidades pequeñas de arsénico en un largo plazo.
Por exposición crónica puede provocar cáncer de hígado y riñón y vejiga (este último es el más demoledor para el ser humano). Algunos síntomas de intoxicación aguda y crónica por ingesta son: dolor abdominal, vómito, diarrea, dolor muscular, aparición de erupción cutánea, entre algunos; otros síntomas son disfunción renal, problemas cardiovasculares y dolores de cabeza.
La población actual del municipio Zimapán es aproximadamente de 45 mil habitantes, esto es, la cabecera y todas sus comunidades. Cabe resaltar que tan sólo en la Cabecera existen 12,000 habitantes.
El presidente municipal de Zimapán describió que la demanda actual es de 80 litros por segundo (l/s), y la oferta que tenemos en este momento es de 50 l/s; esto es, con los habitantes actuales tenemos ya un déficit de 30 l/s.
El 33 por ciento (%) de las fuentes es de un abasto subterráneo, pero que tenemos un problema con esas fuentes, sobre todo en lo que es la zona de la cabecera municipal, que es un problema de arsenicismo, la NOM 127 nos marca 0.025 miligramos por litro de arsénico, lo que es para consumo humano.
Con estas investigaciones se ha logrado detectar que el agua utilizada por la población ha llegado a concentrar hasta 1.1 mg/L de arsénico, 40 veces más la norma para agua potable que es de 0.025 mg/L.
Recordó que en 1992, el Centro de Salud de Zimapán identificó presencia de arsénico en la sangre de algunos niños, concluyendo posteriormente que el origen era el agua que consumían.
Y en 1996 se canceló el poso de “El Muhi” (por el nombre de la comunidad en donde se encuentra), uno de los más contaminados, y se abrió el poso de “La Cruz” (a 35 kilómetros de la cabecera municipal), con lo que se creía resuelto el problema.
Chema Lozano, como lo conoce la población informó que actualmente Zimapán trae agua del municipio de Tasquillo, a través del acueducto Tasquillo, que tiene muy poca cantidad de arsénico, que se mezcla con el pozo que menos tiene y da como resultado que estemos mandando agua a la ciudadanía que contiene 0.087 mg/l de arsénico, aproximadamente 3.5 veces por encima de la norma nacional y enviando agua contaminada a la población.
Dejando como resultado, según las investigaciones, arsenicismo en el 50 por ciento de las mujeres estudiadas y que consumían agua contaminada además de que la población que consume agua contaminada, esta propensa a padecer, también, problemas circulatorios, gangrena de extremidades, afectación de aparatos respiratorios, diabetes o cáncer de distintos órganos.
“Lamentablemente no todo mundo tiene la capacidad económica de comprar agua de garrafón o botellas de agua y hay algunos que se ven obligados a consumirla”, reconoció, Chema.
Mencionó que ha sido petición de su gobierno tener tres plantas potabilizadoras-purificadoras, con el respaldo del Instituto de Geofísica, por lo que han tenido reuniones con cuatro empresas para instalar esos equipos. Dos de la ciudad de México, una de Querétaro y la otra de Italia.
Para finalizar, el presidente municipal, José María Lozano describió que el costo de una planta para poder procesar 22 litros por segundo cuesta 20 millones pesos. Esa es una primera propuesta, y en una segunda estamos manejando tres pozos pequeños más que están en la cabecera municipal; la suma de los tres nos daría algo así de 16 litros por segundo y esa planta nos cuesta 10 millones de pesos.
Con esto tenemos en Zimapán una gran esperanza de que se construyan y que se lleven a cabo las plantas potabilizadoras. Tenemos una gran esperanza que esas 45 comunidades que viven, desafortunadamente comprando agua, cuando pueden o de los manantiales que están en el lugar. Ahora, por primera vez después de toda la vida van a tener una red con la que van a contar en sus casas, sus familias van a tener agua de calidad.
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