* El gobierno de Calderón debe dar respuesta a las miles de familias que viven en la incertidumbre de no saber dónde están sus seres queridos, asegura
Por José Franco
El reporte de la Comisión Nacional de Derechos Humanos sobre que existen más de 5 mil expedientes de personas reportadas como extraviadas o ausentes es alarmante y otra prueba de la estrategia fallida de Felipe Calderón en su política de seguridad pública, aseguró la diputada del PRD, Leticia Quezada Contreras.
“Las cifras de la CNDH que revelan que además existen 8 mil 898 cuerpos que no fueron identificados o cuyas causas de muerte no fueron aclaradas, agrava el ya de por sí doloroso número de víctimas que ha dejado el sexenio de Calderón.
“Estamos hablando de miles de familias que viven en la incertidumbre de no saber dónde están sus seres queridos, si están vivos o si han sido víctimas de tratantes de personas, narcotráfico o alguna otra modalidad del crimen organizado”.
La legisladora se dijo preocupada porque los datos del Sistema de Información Nacional de Personas Extraviadas y Fallecidas no Identificadas revelan que la tercera parte de estas personas reportadas son mujeres, quienes podrían haber sido o estar siendo víctimas de violencia de género.
Recordó que el Gobierno federal reconoce por lo menos 35 mil muertes relacionadas con su lucha contra el narcotráfico “y si a éstas sumamos las más de 5 mil expedientes de desaparecidos y casi 9 mil cuerpos no identificados, llegamos a una cifra alarmante”.
Al final de cuentas, consideró, tanto los muertos por el narcotráfico, como las y los desaparecidos y las muertes no aclaradas, son víctimas de la ceguera gubernamental que mantiene sus fallidas estrategias de combate a la delincuencia organizada sin ofrecer a los mexicanos políticas públicas que generen mayores oportunidades.
“Hablamos de que más de un millón de jóvenes se integran cada año a las filas del desempleo. No es difícil imaginar que ante la falta de opciones para trabajar y estudiar sean presa fácil de la delincuencia organizada, ya sea a través de la explotación criminal o trata de personas”.
“El gobierno de Calderón debe responder a las familias y decirles: qué ha pasado con sus hijos, sus padres o hermanos, ¿por qué no están en casa? ¿qué o quién los arrancaron del seno del hogar? ¿por qué tuvieron que irse o por qué se los llevaron?
“Necesitamos saber también qué se está haciendo para regresar a niños, hombres y mujeres a sus hogares, si hay acciones gubernamentales para su localización o, como en tantos casos, se archivan como expedientes cerrados.
“Porque ya no se investiga, se usa la supuesta lucha contra la delincuencia para justificar muertes y desapariciones, como si fuera normal que la gente se muera o se vaya de sus hogares sin mayor explicación”, afirmó.
El diagnóstico dado a conocer, subrayó Quezada, además de alarmante, hace pensar que se están repitiendo escenarios de tiempos pasados, cuando en México el desaparecer una persona fue una práctica común.
"Las cifras son escalofriantes, pareciera que estamos en los tiempos de la guerra sucia en los años 70, pareciera que no tenemos instituciones que respalden la seguridad de las personas, nos hace pensar: ¿qué está haciendo la PGR?, ¿quién se está encargando de resolver este problema o de plano, nadie investiga en este país? ¿el gobierno sólo se dedica a apilar cuerpos en una fosa común o a registrar ausencias?" aseveró Quezada Contreras.
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