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GDF debe reforzar las medidas de seguridad en las zonas colindantes con el Estado de México: Lobo Román

* El narcotráfico, el feminicidio, el terror y la violencia persisten en el Edomex

María Teresa de Jesús

El diputado local del PRD Víctor Hugo Lobo Román aseguró que el Gobierno del Distrito Federal debe reforzar las medidas de seguridad en las zonas colindantes con el Estado de México, a fin de contrarrestar el efecto “cucaracha”.

Y es que el legislador perredista advirtió que la puesta en marcha del Plan Estratégico en contra de la delincuencia en la vecina entidad de la capital del país, podría expandir la violencia al Distrito Federal.

Por ello, también consideró necesario llamar a las autoridades federales a que implementen estrategias de inteligencia y no solo disuasivas, que permitan la captura de los delincuentes antes de que abandonen la entidad y se trasladen a la capital del país.

Además, pidió al gobierno federal no cometer el mismo error que en Michoacán, pues tras la puesta en marcha del operativo los cabecillas de los grupos delincuenciales huyeron a los estados circunvecinos como Guerrero, Jalisco, Estado de México y Jalisco.

Mediante un punto de acuerdo que presentará este martes, Lobo Román, solicitará a los titulares de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF) a tomar las medidas pertinentes en ese sentido.

Se trata -afirmó el legislador perredista- de reforzar e intensificar las medidas precautorias en materia de seguridad pública en las zonas colindantes con el Estado de México, y así poder evitar que la ola de inseguridad y altos niveles de violencia se trasladen a la ciudad de México.

Lobo Román refirió que la semana pasada, el secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong a petición del gobernador Eruviel Ávila, estableció e instrumentó un plan estratégico de respaldo cuyo objetivo es proteger y devolver la seguridad a sus habitantes.

Por último, los diputados locales consideraron que los vecinos del Estado de México, sufren hoy más que nunca un flagelo que desgarra el tejido social y las propias instituciones; el narcotráfico, el terror y la violencia, aunque incomode, persiste; los daños colaterales de la guerra contra el narcotráfico se siguen sintiendo y en diversas entidades la espiral de violencia se ha recrudecido.